La Política de Fortalecimiento de los Oficios emitida por el Ministerio de Cultura en el 2018, busca promover e incentivar la formación y desarrollo de los diferentes saberes ancestrales, así como el aprovechamiento del saber técnico contenido en muchas de las labores tradicionales que enriquecen nuestro haber cultural. En este marco, el libro Oficios del Paisaje Cultural Cafetero reconoce el trabajo de quienes se dedican a estas actividades productivas, que en el escenario del Paisaje Cultural Cafetero de Colombia PCCC toman gran relevancia, como patrimonio inmaterial vigente en un territorio que debe preservar los valores que llevaron a su Inscripción en la Lista de Patrimonio Mundial por parte de la UNESCO.

La investigación que da lugar a esta es resultado de un proyecto sobre patrimonio, dicha investigación es desarrollada en RED, por la Facultad de Arquitectura de la Universidad La Gran Colombia – Armenia y la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Universidad Católica de Pereira; además en ella participaron la Universidad de Caldas y Artesanías de Colombia, duró alrededor de 3 años, y se realizó en 22 de los 51 municipios del PCCC, demostró que varios de estos oficios están en riesgo de desaparecer y de manera particular aquellos que se relacionan con el conocimiento constructivo de la arquitectura regional de bahareque. De ahí, que cobre sentido el proyecto de Vivienda para el PCCC, como uno de los cuatro proyectos estratégicos priorizados por la Comisión Técnica Intersectorial en el año 2019, con el cual se busca valorar y recuperar esta tradición constructiva aplicándola a la solución del déficit de vivienda en los ámbitos urbanos y rurales, todo esto en correspondencia con el concepto de Vivienda de Interés Cultural que establece la Ley 2079 del 14 de enero de 2021

Ley que define la Vivienda de Interés Cultural como aquella que se caracteriza por estar totalmente arraigada e imbricada en su territorio y su clima; su diseño, construcción, financiación y criterios normativos obedecen a costumbres, tradiciones, estilos de vida, materiales y técnicas constructivas y productivas, así como a mano de obra locales.

Esta Ley explicita, además, que los proyectos tipo para la vivienda rural, desarrollados en los territorios cobijados por el PCCC, tendrán como referente la arquitectura regional desarrollada por la cultura cafetera, de manera que los modelos de vivienda que se diseñen deben reconocer sus elementos estéticos, formales, espaciales y tecnológicos.

Teniendo como base el esquema de esta clasificación de Artesanías de Colombia, a continuación, se establecen las materias primas reconocidas en el trabajo de campo de la investigación en los diferentes oficios presentes en el Paisaje Cultural Cafetero Colombiano, determinando que en él se utilizan materias primas de las todas las diferentes categorías.

El SIEAA es el encargado de capturar, validar y analizar la información de todos los artesanos en el país con el propósito de caracterizar sociodemográfica, productiva y comercialmente al sector artesanal, para dar focalización efectiva y clara de los esfuerzos que ejerce la entidad. A partir de la información de artesanos colectada por el SIEAA – Serrano (2019), se realizó el proceso de sistematización, cuyo resultado se presenta a través de gráficas y datos numéricos. Se investigaron las características sociodemográficas de la población, los procesos de formación y oficios propios de la región o por lo menos los más representativos (Márquez y Serrano, 2017).

Risaralda

​​Este capítulo presenta los oficios documentados en el Departamento de Risaralda, donde se logró entrevistar a 17 artesanos de los oficios de la marroquinería en Dosquebradas; de la tejeduría en seda en Guática; los trabajos en madera, la tejeduría en bejuco, en enchape sobre madera, el trabajo en guadua y en palo de café en Santa Rosa de Cabal; la orfebrería, en Quinchía; el trabajo en cerámica y la tejeduría en chaquiras o mostacilla checa de los Embera Chamí en Pereira; el trabajo en madera en La Celia; y la cerámica en guadua en Marsella. Se registran la ubicación de los oficios en el mapa del Paisaje Cultural Cafetero de Risaralda, en siete de los diez municipios del Departamento de Risaralda que pertenecen al PCCC. A través de sus historias de vida se reconocen las formas en que cada uno de ellos ha aprendido su oficio, la manera como se han organizado, los procesos productivos que realizan, los productos que elaboran y cómo los comercializan. Al final de cada historia de vida se presenta una síntesis de los rasgos más distintivos de la experiencia personal de cada artesano.

Caldas

En este capítulo se expone el registro realizado en 7 de los 18 municipios del Paisaje Cultural Cafetero en el Departamento de Caldas. Al iniciar, se presenta el mapa en donde se superpone el croquis del departamento y el del territorio del PCCC, donde se ubican los oficios en los diferentes municipios para tener una vista general de las manifestaciones presentes en este espacio. Se documentan 13 historias de vida de los artesanos en sus lugares de trabajo, realizando sus procesos de elaboración de sus productos, referenciando las particularidades y detalles de cada oficio. Siempre acompañando el relato de fotografías que dan testimonio de los contextos de trabajo y la transformación de la materia prima. A manera de síntesis, se recoge al final de cada historia de vida, los rasgos más distintivos de sus vivencias personales. Y al final del capítulo se listan en un directorio los nombres y datos personales de contacto de cada artesano.

Quindío 

Al inicio del capítulo se encuentra el mapa del departamento del Quindío y la delimitación del territorio del Paisaje Cultural Cafetero en este departamento; allí, se ubican las manifestaciones de los oficios documentados en seis de los once municipios del PCCC en el Quindío. De manera tal, que en la Armenia se halla la joyería y la orfebrería, el trabajo de talla en madera, la alfarería, la construcción y restauración de vivienda tradicional, y el trabajo en cáscara de huevo; en Calarcá, la tejeduría en guasca o calceta de plátano; en Circasia, la tejeduría en patchwork y el oficio de enchape en hoja caulinar de la guadua; en Filandia, la cestería y la tejeduría en bejuco; en Montenegro, el trabajo en guadua escultórica; y en Quimbaya, la joyería y orfebrería. Se exponen también las historias de vida de 15 artesanos con los testimonios de su trayectoria desde sus inicios en el oficio y a lo largo de su trasegar en su labor, la manera cómo lo realizan, sus fuentes de inspiración y los productos que elaboran, junto con las fotografías de su taller, herramientas y procesos productivos. Al final del capítulo se cuenta con el directorio con los datos de contacto de los artesanos entrevistados.

Es difícil encontrar personas como don Jaime Ruíz (P. 347-350) que tengan el conocimiento requerido para realizar estas viviendas. Así mismo, talleres como el de don José Darío Martínez Maya que se dedican a la elaboración de tableros laminados en guadua (P. 391-397) o como el de Víctor Alonso Martínez Quirama (P.399-407) que elabora productos en guadua arquitectónicos y de decoración para viviendas y hoteles a los cuales agrega valor y diferenciación; son talleres pequeños, de tipo artesanal y cada vez son menos, pues varios de ellos han cerrado.

La innovación que pueden generar los arquitectos desde el conocimiento artesanal en sinergia con otros conocimientos profesionales, tiene un gran potencial para la arquitectura del PCCC, muestra de ello es la experiencia del Arquitecto Iván Gómez García (P.187-195) quien cuenta en su taller con varias líneas de productos en guadua para la arquitectura y también objetos, donde ha desarrollado la cerámica de guadua y recientemente el mortero de guadua.

Las escuelas de artes y oficios, como la de Salamina en Caldas, se constituyen en una estrategia para el desarrollo de estas actividades al servicio de la arquitectura, que integre los valores regionales, y posibiliten la apropiación de las técnicas y saberes ancestrales en los jóvenes (p.446). Allí también en Salamina, hay exponentes como don Edilson Antonio Castrillón García (P. 253- 261) dedicados al trabajo en madera para la construcción, el mobiliario y la artesanía, donde se preserva el manejo de la talla y los calados tan importantes para la arquitectura de esta región. Los artesanos aquí nombrados son algunos de los que más directamente están involucrados con los procesos de construcción de esta arquitectura y se constituyen en ejemplo de lo que pasa en los municipios del PCCC; es importante resaltar como durante el desarrollo del libro se registran otros exponentes incluso de otras técnicas, que en la medida en que se reconozca su trabajo y se articule a los proyectos que realicen los arquitectos, se podrá generar un mayor avance para el sector y un aporte valioso a la calidad de la arquitectura en este ámbito cultural.

Autor(es):

Yaffa Nahir Ivette Gómez Barrera
Javier Alfonso López Morales
Gloria Inés Duque Arango
Juan Diego Gallego Gómez
Elizabeth Montoya Arias
Paula Andrea Correa Montáno