En esta casa de retiro, sesgar la tendencia vertical de los Eucaliptos era una invitación a sumergirse en el empinado talud boscoso. En adición, si esta horizontal artificial se engrosaba, descendía, se descolgaba, permitiría entrever la lejana cota de agua de un embalse.
Bajo esta premisa, surge como elemento tanto formal como técnico una extensa faja metálica: la viga Warren compensada que recorre y se apoya en toda la extensión de las áreas privadas y, en la terraza pública, se suspende asimétricamente permitiendo la contemplación de la masa arbórea.
En fachada, una fortificación pétrea garantiza el hermetismo del interior. La larga muralla circunda un patio, se orada en forma de escalera para ascender a la cubierta habitable y define el zaguán a partir del cual comienza el ritual de ingreso. En su espesor se alojan también un robusto contenedor ajardinado, áreas de depósito y técnicas como el potabilizador de agua.
Tipológicamente la planta se dispone en forma de U en torno a un talud ascendente, semejando la casa patio. A su vez las alas perimetrales se disponen paralelas al borde boscoso privilegiando así las visuales de todas las estancias interiores.
La cubierta, superficie habitable, lineal y continua, solo es alterada por el negativo que calca el área de la alberca. El vacío no solo enfatiza el enorme voladizo, es también el instrumento que invita a elevar la mirada al cenit.
Autor(es):
Llano Arquitectos
Juan Camilo Llano C.
