Bienestar para el Trabajo

El proyecto arquitectónico, situado en un entorno industrial del Municipio de Yumbo, se presenta como una propuesta que plantea cómo resolver e integrar un área de bodegas y oficinas de manera confortable en un sector hostil para el peatón y quienes habitan durante la mayor parte del día estas áreas industriales. La premisa central del proyecto es la creación de espacios intermedios que regulen bioclimáticamente las áreas de trabajo para maximizar el confort de sus ocupantes.

Una de las características más destacadas es la disposición estratégica de las oficinas a lo largo de las fachadas que dan a las calles, generando una fachada amigable y hospitalaria en el entorno industrial. Esta elección no solo transforma la percepción del edificio desde el exterior, sino que también mejora la experiencia de quienes trabajan en las oficinas al proporcionar vistas agradables hacia los patios con vegetación nativa que proponen un paisaje propio. En contraste, las bodegas quedan ocultas detrás de las oficinas, estableciendo una clara separación funcional entre los dos usos principales del edificio. Esta disposición permite que ambas funciones operen de manera independiente, optimizando la eficiencia y la seguridad operativa.

La distribución de las naves o barras separadas crea patios intermedios llenos de vegetación y sombra, así como la ocupación de los parqueaderos en el primer piso abiertos crea el flujo de ventilación en el interior del edificio, mejorando la calidad del ambiente en el entorno industrial y facilitando la integración de espacios verdes, contribuyendo al bienestar general de los usuarios y sus visitantes.

La orientación cuidadosa de las barras o naves con respecto al sol busca que las fachadas más cortas se expongan al sol, mientras que las fachadas más largas cuentan con quiebra soles que ofrecen sombra, creando un equilibrio térmico que reduce la ganancia de calor y garantiza un ambiente interior más confortable y sostenible.

El aprovechamiento energético del edificio, mediante paneles solares en cubierta de bodegas, oficinas y fachadas, actualmente está produciendo más de la energía suficiente para sostenerse, dejando así una energía residual que se entrega a la red de energía de la ciudad.

En resumen, el proyecto arquitectónico en el entorno industrial logra un equilibrio entre funcionalidad y estética, priorizando la sostenibilidad y el bienestar de sus usuarios. La cuidadosa planificación de espacios, la integración de elementos bioclimáticos y la consideración de la relación con el entorno industrial hacen de este proyecto un ejemplo de cómo la arquitectura puede mejorar significativamente la calidad de vida en ambientes tradicionalmente desfavorables.

Autor(es):  ESPACIO COLECTIVO ARQUITECTOS

ARQ. CARLOS HERNAN BETANCOURT
ARQ. ALDO MARCELO HURTADO

Fotografías: Santiago Robayo